Otromundo: antología 1956-2007 - Google Livros
Madrugada
Jugos del cielo mojan la madrugada de la ciudad violenta.
Ella respira por nosotros.
Somos los que encendimos el amor para que dure,
para que sobreviva a toda soledad.
Hemos quemado el miedo, mirado frente a frente al
dolor
antes de merecer esta esperanza.
Hemos abierto las ventanas para darle mil rostros.
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